VR/ Chichinales –  Varios fueron los vecinos de la zona rural de Villa Regina y Chichinales que esta mañana expresaron nuevamente su malestar por la sorpresiva decisión de la empresa KoKo de quitar algunas frecuencias del trayecto interurbano entre ambas localidades, situación que los llevó a esperar un tiempo considerable hasta el próximo servicio, incluso soportando las bajas temperaturas que se registraron en las primeras horas de hoy.

Uno de los primeros testimonios se registró en Chichinales a partir de que algunas personas que aguardaban el KoKo desde antes de las 7 tuvieron que esperar hasta las 9 para poder viajar. “Es una locura. Con el frío de esta mañana estuve esperando más de dos horas”, dijo uno de los usuarios.

En otros casos varias fueron las personas que no pudieron viajar debido al colapso que presentaban las pocas frecuencias que funcionaron. A ello debe sumarse que en la terminal de Regina la espera para volver a casa también fue considerable.

Otra situación manifestada a este medio fue la que se produjo con aquellos chicos que viajaron desde Godoy hacia Regina para concurrir al colegio Don Bosco, establecimiento al que debieron concurrir a pie una vez que arribaron a la terminal.

Hasta este mediodía nadie de la empresa brindó alguna explicación de manera oficial, por lo que hasta los propios trabajaron desconocían si se trató de algo excepcional y que se puede repetir durante esta tarde, o si la suspensión será permanente como sucedió durante la pandemia con el retiro de algunas frecuencias. En este sentido, los principales reclamos en su momento pasaron por la quita del servicio nocturno Chichinales-Regina y también el recorrido que abarbaba la calle Fray Luis Beltrán y barrio Matadero a la hora de unir la zona urbana y rural sureste de Regina (Villa Alberdi y alrededores).

“Es una vergüenza y una humillación lo que hacen con nosotros. No puede ser que esta empresa monopólica nos deje otra vez a pie”, fue parte de lo que expresó  esta mañana una vecina de Regina a LCR.